INTRODUCCIÓN: El Apocalipsis es mucho más que un libro profético. Es también un libro lleno de esperanza para aquellos que siendo capaces de reconocer su propia indignidad ante Dios aceptan en contraste la dignidad de Jesús y la posibilidad de ser salvos a través de Él. Este capítulo 5 así lo demuestra:
- NUESTRA INDIGNIDAD: (Apocalipsis 5:1-3) Todos somos pecadores. No existe nadie, por bueno que parezca, que pueda sentirse digno ante Dios.
- NUESTRA TRISTEZA: (Apocalipsis 5:4) Si nos interesa estar en paz con Dios nos sentiremos frustrados por nuestra indignidad, como se sintió Juan.
- NUESTRA ESPERANZA: (Apocalipsis 5:5) pero no todo está perdido. ¡Hay esperanza en Cristo!
- NUESTRA SALVACIÓN: (Apocalipsis 5:6-8, 11,13a) Él murió para salvarnos y redimirnos con su sangre. Si lo aceptamos, ¡podemos tener la certeza de ser salvos!
- NUESTRA ADORACIÓN: (Apocalipsis 5:9-10, 12, 13b) La certeza de ser salvos nos provoca a adorarle.
CONCLUSIÓN: (Apocalipsis 5:14) la palabra AMÉN es el cuño de ASÍ SEA a esta hermosa historia de salvación universal que también puede ser tu propia historia personal. ¡ASÍ SEA!