Puesto que la Sra. Caridad Diego Bello, Jefa de la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, advirtió que el viejo techo del templo bautista de Taguayabón no recibiría el permiso solicitado para su reconstrucción mientras yo fuese el pastor de la iglesia, y ya que es ella quien políticamente tiene la primera y última palabra a nombre del General Raúl Castro en todo lo que a religión se refiere en esa isla en la que se comportan como si fuese una finca particular; decidí salir por un tiempo para que pudieran reconstruirlo para luego volver y disfrutar del techo nuevo. Cuando mi arresto hace un año durante la visita del presidente Barack Obama hermanos bien intencionados me aconsejaron esta salida temporal porque al ritmo que íbamos ¨se iban a quedar sin templo y sin pastor¨. Aunque ya la Sra. Caridad concedió el permiso de reconstrucción del techo como premio por mi salida, todavía no se ha puesto el primer clavo o la primera viga, todo indica que será un proceso sin apuro, que tenderá a dilatarse en el tiempo como para que envejezcamos en la espera.
Mientras esto ocurría en Cuba, una iglesia también bautista hispana en un lejano pueblo llamado Waldorf oraba sin que lo supiésemos por una familia pastoral. En nuestra salida temporal y sin conocer de los propósitos divinos ni de las oraciones de esta iglesia, de repente y casi sin saber cómo, me vi ocupando el púlpito de esta congregación que tenía un techo, pero no tenía pastor. Observando que demora el proceso de reconstrucción del techo de nuestra iglesia bautista en Taguayabón en Cuba, y que de momento nuestro regreso privaría a la iglesia del permiso que la Sra. Caridad ha concedido; hemos decidido entre tanto aceptar formalmente la petición de la iglesia en Waldorf para que nuestra espera tenga así un sentido y esta iglesia reciba, mediante nuestra presencia, la respuesta a sus oraciones.
El sábado 1 de abril inició formalmente mi pastorado en la Iglesia Bautista de Waldorf luego de seis meses de ser su predicador domingo tras domingo. Comencé el pastorado participando de una carrera deportiva como parte de una celebración anual de la comunidad llamada St. Charles Running Festival convocada por el Charles Regional Medical Center, y al día siguiente, domingo 2 de abril, oficié la ordenanza de la Santa Cena y prediqué mi primer sermón ya como pastor oficial de la iglesia titulado ¨Corramos juntos¨ basado en el texto bíblico de Filipenses 3:12-21. El domingo 23 celebraremos un servicio especial de toma de posesión en unión con la hermana iglesia anglo con la cual convivimos. Para hacer aún mayor la bendición estarán presentes hermanos que vienen desde Cuba a participar de la celebración y que representan al Instituto Patmos que fundamos hace cuatro años y que seguimos coordinando aún a distancia.
La Iglesia Bautista de Waldorf es una iglesia dichosa: tiene techo, tiene pastor y no depende de las amenazas de ninguna señora que responda a su vez a los caprichos de ningún general. Serviremos a esta Iglesia con el mismo amor con que lo hiciéramos en Cuba, mientras esperamos sea reconstruido el techo de nuestra iglesia allá. Cambio temporal de iglesia pero continuación de un mismo ministerio al servicio del mismo Señor, Jesucristo, el único que debiera ser ¨Rey y Juez de nuestra conciencia y de la iglesia¨.