Yoaxis y Mario, coordinadores de Patmos, junto a Reina y Daniel Josué Pérez, líderes de los bautistas bereanos en Cuba. En el aniversario 19 de su reorganización.
El domingo 21 de febrero las iglesias bautistas bereanas, en el oriente de Cuba, en su sede principal, en el poblado de Arroyón, Chaparra, Las Tunas, celebraron el aniversario 19 de su reestructuración que tuvo lugar el 23 de febrero de 1997. 71 años estarían celebrando si el régimen comunista no se hubiese lanzado con todo en contra de ellos a principio de los ’60. El pastor Daniel Josué Pérez, luego de haber servido por tres pastorados en la obra de Los Pinos Nuevos decidió en el año 1997 reorganizar el rebaño disperso que misioneros norteamericanos habian fundado y de los cuales su padre llegó a ser uno de los primeros frutos, y el líder nacional mas prominente de este grupo evangélico en Cuba.
Como coordinador de Patmos fui invitado para ofrecer un discurso conmemorativo. Inspirado en Lucas 3.1-20 ofrecí mi conferencia «¡Denuncia y Anuncia!» en la cual valoré esta doble pero indisoluble función del Evangelio que sirvió de base para ilustrar la estructura de documentos tan importantes y prácticos como son los policys papers emitidos desde thinks tanks hasta individuos simples pero guiados por sentido común. El Evangelio para confrontar el problema del pecado; los policys papers para abordar críticamente políticas públicas, sean cuales fueren.
Fue una excelente jornada para celebrar, recordar historias pasadas y remontarnos al futuro. Las iglesias bautistas “Misión Bereana”, llegadas a Cuba desde 1946 fueron sometidas en los ’60 al total despojo de propiedades hasta que en 1976 les retiraron su carácter legal considerándoles ya totalmente extinguidas como consecuencia de tanta agresión. Reagrupados en 1997 bajo el liderazgo de Daniel Josué solicitaron la renovación de su legalidad en la lista del Registro de Asociaciones del Ministerio de Justicia pero solo recibieron como respuesta la segunda oleada de expropiaciones y desalojos en el 2000, ocho años después del vitoreado cambio constitucional que declaraba que el Estado dejaba de ser confesionalmente ateo y se proclamaba laico; para confirmar que el tal estado laico solo existe en la letra constitucional pero realmente se le niega con la práctica. En junio de 2014 la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos ratificó la negativa a devolverles a la lista y añadido a ello se les amenazó con nuevos desalojos si continuaban empecinados en sus reuniones ilícitas. A pesar de las adversidades este hermoso grupo de bautistas cubanos sigue empeñado en seguir adelante con su fe y actualmente ya son unas once iglesias presentes en varias provincias.
Inspirado en Lucas 3.1-20 ofrecí mi conferencia «¡Denuncia y Anuncia!»