Ha sido un inicio de año adverso para las libertades religiosas en Cuba. El templo del Movimiento Apostólico «Fuego y Dinámica», liderado por el carismático líder Bernardo de Quesada Salomon ( bernardo65@nauta.cu , bernardoquesada@yahoo.com , +5352931429 , +5353135111 , +5332213034 ) fue demolido por la policía el 8 de enero: https://t.co/RrLwCPcbsp . Otro templo similar en provincia Las Tunas corrió igual suerte, el de la iglesia pastoreada por Juan Carlos Nuñez.
Varios otros sitios de cultos han sido amenazados de actos similares. Desde septiembre de 2013 resalta el caso de Yiorvis Bravo Denis, +5352768861 o +5332241111 en el local legado por Omar Gude Perez luego de una condena en prisión. Al líder religioso Alain Toledano, de Santiago de Cuba, le han advertido lo mismo reiteradamente. El pasado 19 de diciembre en mi cuenta twitter @maritovoz alerté de amenazas a una de estas iglesias en provincia Sancti Spiritus, pastoreada por Jesus Vigueras Ferias, +5354843849. También en la primer semana de 2016 al pastor Alexander Matos Rodríguez (+5353221602), en San José de las Lajas, provincia Mayabeque, le fue cortado el servicio eléctrico y le han sido cobradas dos multas por parte del Órgano de la Vivienda, la primera de 1000 CUP, y la segunda, tan reciente como el pasado martes 5 de enero, de 500 CUP, más el valor añadido de la misma amenaza.
Ya en el pasado varios templos han sido confiscados o demolidos a las iglesias bautistas bereanas en provincia Las Tunas, lideradas por el pastor Daniel Josué Pérez Naranjo, +5353137732. En Santiago de Cuba, Reparto José Martí, en junio de 2013, el lugar de reunión del movimiento apostólico liderado por Marco Antonio Perdomo Silva, +5353630754, fue demolido en presencia de la familia que lo habitaba: Esmir Torreblanca, su esposa y dos pequeños niños (el sitio ocupa la foto de portada del informe a violaciones a las libertades religiosas en Cuba que entonces publicó Solidaridad Cristiana Mundial (CSW)).
Todos los grupos y líderes religiosos mencionados se encuentran proscritos a pesar de solicitar durante años su inclusión en la lista del Registro de Asociaciones del Ministerio de Justicia, pero la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) lo impide y ordena actos vandálicos como los denunciados.
Tal vez más cruel que las mismas confiscaciones, demoliciones o negativas a registrar legalmente, sea la pérfida actitud de la Sra. Caridad Diego Bello, Jefa de la referida Oficina, o de sus homólogos en cada sede provincial o municipal del Partido quienes con cierta periodicidad reúnen a los lideres de grupos registrados legalmente para instigar en ellos odios religiosos y captar cómplices que aprueben actos como los de hoy. En reuniones de este tipo celebradas el pasado mes de diciembre en los municipios villaclareños Camajuaní y Remedios varios pastores que asistieron me reportaron este tipo de procedimiento en referencia incluso a mi ministerio, y esto a pesar de que soy pastor en una denominación que posee personalidad jurídica en Cuba desde 1905 (Asociación Convención Bautista de Cuba Occidental). En la reunión convocada en Remedios el Secretario del PCC municipal me calificó de «mercenario» y alegó que yo «había cruzado una raya» en alusión al Foro del Instituto Patmos coauspiciado por una logia masónica el pasado 17 de mayo; supe que al menos uno de los pastores presentes objetó contra tal tipo de acusaciones en mi ausencia.
Al enterarme de la profanación contra el templo de «Fuego y Dinámica» en Camagüey intenté trasladarme hasta allí en un intento de mostrar solidaridad a mi hermano en tribulaciones Bernardo de Quesada Salomon, y especialmente al enterarme del arresto de amigos tan valiosos como el periodista Henry Constantin por intentar informar de los desmanes. Tuve que desistir y regresar a casa al conocer por vía de mi esposa que ella y mis dos hijas se encontraban rodeadas por la policía como parte de un operativo con la anuencia o por ordenes directas de la Oficina del PCC. Agradezco a todos quienes al conocer de esta maniobra lo denunciaron a través de las redes sociales. Aunque la policía me buscaba expresamente con el objetivo manifiesto de arrestarme, al llegar a mi comunidad ya el operativo se había desmontado, y no encuentro otra respuesta que no sea la de la solidaridad manifestada, si bien lograron impedir que por esta vez yo llegase a Camagüey.
Al menos mediante esta denuncia expreso por el momento mi solidaridad a Bernardo y a su grupo «Fuego y Dinámica». Ante las violaciones a las libertades religiosas de las que han sido blanco mis principios cristianos y bautistas no me permiten otra opción que pronunciarme en su favor.
Aunque en Cuba no le concedan hasta el momento el carácter legal que le corresponde, y aunque se esté o no de acuerdo con su teología, a nivel internacional Bernardo es un reconocido líder y autor de varios libros que incluyen su tan polémico y temido «En el ojo del huracán» en el cual describe un contexto adverso que en un día como el de hoy ha sido muy tangible, pero por el que deberán responder quienes ahora detentan los poderes político y militar de los que tanto abusan. Y no tardarán en hacerlo, ante los hombres, y ante Dios.
(Fotos: En la primera, entre el periodista Henry Constantin, detenido por intentar informar acerca de la demolición en Camagüey, y mis hermanos Yiorvis Bravo Denis y Bernardo de Quesada. En la segunda, en Santiago de Cuba, entre mis hermanos Marcos Antonio Perdomo Silva y Esmir Torreblanca, y otros dos hermanos del mismo movimiento en cada extremo.)
