El capítulo 8 de la 1ra Epístola del Apóstol Pablo a los Corintios trata un tema que afectaba a la iglesia, y que por extensión era un problema generalizado para los creyentes en el nuevo movimiento que era el cristianismo en la segunda mitad del siglo I: el paganismo, los ídolos y la comida sacrificada a estos en el contexto de Corinto y Acaya, pero en el mundo grecorromano en general. Este asunto es abordado por Pablo a la luz de un tema fundamental en el pensamiento paulino, y en el Nuevo Testamento en general: el Amor. Todos los asuntos pueden, y deberían ser sometidos, ante ese factor crucial. El tema del Covid-19 no está exento de ser mirado a través del prisma del Amor:
1. El amor edifica a la iglesia: (1 Corintios 8:1b-2) (1 Pedro 4:8)
2. Dios siempre corresponde al amor: (1 Corintios 8:3) (1 Juan 4:19, en el contexto de 1 Juan 4:7-21)
3. Todo debería abordarse a través del prisma del amor: (1 Corintios 8:4-13) Luego de haber introducido el tema del amor como un paradigma dentro de la iglesia a través del cual deberá ser abordado cualquier asunto, Pablo pasa a abordar el tema de “la comida ofrecida a los ídolos”, ofreciéndonos un ejemplo perfecto como principio transferible para que nosotros podamos abordemos también cualquier otro tema que nos afecte hoy, de la misma manera como el tema de “la comida ofrecida a los ídolos” afectaba a los corintios. (1 Corintios 12:31 – 1 Corintios 13:1, 13) ¿Y qué tema hoy nos afecta a todos por igual si no es el tema del Covid-19? Abordemos el tema del Covid-19 pues a través de la lupa del Amor:
a) Orar los unos por los otros, como muestra de preocupación los unos por los otros (Santiago 5;16), especialmente por los enfermos o por quienes han perdido seres queridos.
b) No dejando de conectarnos, como algunos tienen por costumbre: simpática paráfrasis de (Hebreos 10:23-25)
c) Toma de decisiones: cuando el amor precisamente nos impide vernos, abrazarnos y besarnos (1 Corintios 16:20; Eclesiastés 3:5), fue el amor y preocupación de los unos por los otros lo que determinó la difícil decisión de que dejásemos de reunirnos físicamente. Y debería ser el amor el que nos guie a tomar la decisión responsable de volvernos a reunir físicamente. Conclusión: 1 Corintios 8:6, conocer a Dios, porque Dios es Amor (1 Juan 4:8, en el contexto de 1 Juan 4:7-21)
(Este Sermón fue predicado por el Pastor Mario Lleonart a la Iglesia Bautista de Waldorf, el 17 de mayo y grabado en vivo durante la transmisiόn vía zoom. Como colofón de cierre al tema abordado en el sermón se añade el canto “Quiero amarte más“ por Glenda García: https://youtu.be/rCEt6Rf_JaQ )