Desde hace ya unas semanas se está dando a conocer la DEMANDA CIUDADANA POR OTRA CUBA de la que un número simbólico de cubanos, no a nombre de partido o institución alguna sino en virtud sencillamente de su ciudadanía, hizo entrega en la Asamblea Nacional del Poder Popular. Para tan corto tiempo este esfuerzo ha encontrado ya una cifra récord de cubanos firmantes tanto dentro como fuera de la isla. Reconocidas figuras internacionales de incuestionable prestigio ya comienzan a mirar con atención y buenos ojos esta demanda que cual bola de nieve va aumentando exponencialmente de tamaño y se dirige directo hacia la llaga, tal vez como último esfuerzo válido para conseguir los cambios que tanto urgen a Cuba mediante una vía totalmente pacífica y civilizada.