Resulta totalmente intolerable -como en su momento le dijera en su propia cara el también difunto expresidente de El Salvador Francisco Flores a Fidel Castro- lo que está pasando dentro la isla con nuestro pobre pueblo al cual quieren imponer, casi por decreto, un duelo que realmente muy pocos desean guardar. Ya tuvieron que sufrir tanto en vida del muerto como para que ahora tengan encima que soportar tener que guardar luto, cuando más bien, si se valora la Historia, se sobran las razones para celebrar, como si lo han podido hacer sus hermanos en Miami que actúan en ambiente de libertad como realmente querrían hacerlo ahora mismo multitudes en la isla.
No solo se trata de que han suspendido durante el duelo la venta de bebidas alcohólicas, como para que nadie pasado de copas se atreva a dar rienda suelta a sus deseos reprimidos; o de la suspensión de fiestas populares como en el caso del poblado de Taguayabón, donde la población expresa su molestia, como si no hubiesen sepultado ya al tirano de sus vidas desde 2006, cuando pasara el mando como un bato a Raúl.
En el ámbito religioso es inaudito lo que ha estado sucediendo en el día de hoy a lo largo y ancho de la isla. Como si fuese poco lo que el área de la fe ha debido soportar desde inicio de los años ´60 y hasta la actualidad. Muchas iglesias han autocensurado por miedo el uso de la música como suelen hacerlo en sus servicios normales. Las congregaciones que no lo han hecho ¨voluntariamente¨, de alguna u otra manera están recibiendo reprimendas oficiales.
Varios pastores me han dado a conocer historias como la que sigue, prefiero no revelar identidades por razones sobre su seguridad:
Amigo, las cosas siguen complicadas por aquí. Hoy tengo noticias que muchas iglesias suspendieron sus cultos de adoración por cultos de oración y otras cantaron a capella, por “respetar el luto nacional”. Nosotros entendimos que “Daniel oró conforme a su costumbre tres veces al día con la ventana abierta”, entonces celebramos nuestra jornada dominical normalmente, aunque para no pasar por irrespetuosos con los que “sienten la pérdida” solo usamos piano y bajo como instrumentos. Pues entre la Escuela dominical y el culto se nos presentaron en la iglesia la presidenta del Ministerio de Justicia Municipal y la funcionaria de Asuntos Religiosos del PCC y me pidieron una entrevista. Me dijeron que por el luto me traían la orden de que debía suspender el Culto y todos los que tuviéramos hasta el día 9. ¿Qué te parece? Ya tú sabes lo que le dije. “ve buscando a la policía y a quien tú quieras pero no suspenderé ningún culto ni dejaremos de cantar,
nosotros cantamos y adoramos hasta cuando mueren nuestros hermanos, eso no es irrespeto, A Dios lo que es de Dios y a Cesar lo que es de Cesar, mátame, encarcélame, pero no suspendemos un culto a Dios”. Hablamos un rato y ellas fueron moderando el tono hasta que se fueron diciendo: “bueno, por lo menos sean moderados”. Yo rápidamente le conté a la iglesia (unos 200 hermanos reunidos) y les dije mi respuesta y que si alguno lo deseaba podía abandonar el culto he ir a su casa, todos dijeron “amén” a cada afirmación mía y nadie se fue. “FUE UN CULTO GLORIOSO, COMO DE LA IGLESIA PRIMITIVA” ¡¡¡Gloria a Dios!!! Sigue orando por nosotros. Bendiciones. Un abrazo.