Cuando el pasado jueves 23 de febrero el periódico Granma y el Noticiero Nacional de Televisión hicieron pública la reunión, celebrada un día antes, entre jerarcas de denominaciones religiosas cubanas y de organizaciones fraternales, con representantes del régimen cubano, mucho pueblo se alarmó al descubrir la comunión existente entre sus líderes religiosos y políticos. Tal concordato coloca en un mismo plano a unos y a otros. Esteban Lazo, miembro del Buro Político del Comité Central del Partido y vicepresidente del Consejo de Estado lo resumió todo al declarar con claridad: Es bueno que se sepa que estamos unidos. Granma lo confirma al decir que estas reuniones se convocan anualmente para reflejar la unidad del Gobierno cubano y las instituciones religiosas y asociaciones fraternales.