11 graduación del Seminario Teológico Bautista ¨Luis Manuel González Peña¨: Pregunta 27 de 30: 27. ¿Por qué el Ministerio de Educación Superior no reconoce a la mayoría de los seminarios bíblicos y teológicos del país, a pesar de estar reconocidos por sus asociaciones, y por qué ni siquiera una de las universidades del país tiene una Facultad de Teología?

poster seminario Este jueves 19 de junio 8pm se realizará la 11 graduación del Seminario Teológico Bautista ¨Luis Manuel González Peña¨ de la Iglesia Bautista ¨La Trinidad¨ de la ciudad de Santa Clara, Cuba. En el horario de la mañana serán discutidas las dos últimas tesis … y en la noche la graduación.

Con los 25 estudiantes que se graduarán serán 333 el total de los graduados por este seminario. Es un honor para mi esposa Yoazxis Marcheco y para mí servir como profesores en este Seminario que el régimen no ve con buenos ojos como demuestra su negativa a reconocerlo como institución, independientemente de que ningún seminario teológico de la isla sea reconocido por el Ministerio de Educación Superior y las facultades de teología brillen por su ausencia en todas las universidades. En 30 preguntas () que llevamos en nuestro viaje a Washington invitados por Solidaridad Cristiana Mundial en septiembre del pasado año la número 27 refleja esta realidad.

Por la existencia de este seminario en particular se mantuvo congelada la cuenta bancaria de 27000 dolares de la iglesia bautista que le fundó y que le acoge. Fue la sanción que la Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba impuso pues el actual rector Rev. Homero Carbonell no es bien visto por estas autoridades políticas que además censura nuestra presencia en el profesorado.

Este Seminario coauspició el primer foro del Instituto Patmos el 28 de febrero de 2013 dedicado. Contra viento y marea llega su oncena graduación, para gloria de Dios y para extensión del evangelio del Reino en Cuba.

Mi misión como padre

Mi hija Rachel esposada

Mi hija Rachel esposada

Tal vez el ministerio más difícil de todos los que ejerzo en Cuba sea el de padre. Debo agradecerle mis dos hijas encantadoras primero a Dios y luego a mi insistente esposa. Yo me negaba a engendrar hijos en un país sin libertad, ellos me convencieron. Hoy doy gracias a ambos pues aunque mi país sigue secuestrado, Rocío y Rachel me hacen la vida más llevadera y constituyen una de los mayores estímulos para seguir dando lo mejor de mí a fin de conseguir una Cuba donde puedan tener la juventud plena que nosotros no tuvimos.

Ser padre en Cuba significa para mí, además de enfrentar la difícil tarea, como para la mayoría de los padres cubanos, de proveer para mi casa, de ser juzgado además como un padre irresponsable. Luchar abiertamente por una Cuba libre, aunque sea con las armas del amor, me atrae el juicio de muchos. Incontables veces he escuchado de boca de amigos y enemigos la frase: «No piensas en tus hijas». En los últimos tiempos este ha sido el principal argumento de los gendarmes de la Seguridad del Estado.

El 25 de enero, vísperas de la reunión de la Celac en La Habana, fui detenido públicamente en presencia de mis hijas. Aquel sábado las sacaba a pasear al mediodía, habíamos planificado visitar la vecina villa de San Juan de los Remedios, a punto de cumplir los quinientos años, aprovechando el día libre de clases de las niñas, y comer en familia fuera de casa.  Mientras esperábamos el transporte público dos agentes de la seguridad aparecieron repentinamente en su Suzuki para decirme que se me prohibía moverme libremente. Les expliqué que no iba a desistir del plan que tenía que salir con mi familia y no les dejé más alternativa que arrestarme, lo cual hicieron violentamente y sin miramientos me llevaron esposado ante mis hijas. Ya preso en el cuartel cuestionaron mi condición de padre ya que según ellos habían provocado la escena frente a ellas.

Cuando me detuvieron otra vez el pasado viernes 6 de junio para intentar impedir la gira de conciertos que habíamos organizado como Instituto Patmos con David de Omni Zona Franca y me trasladaron esposado de Santa Clara hasta mi casa, y no teniendo ninguna razón convincente para justificar este nuevo arresto, el agente que me llevaba en la patrulla solo arguyó: «Lo llevamos pastor porque es un padre irresponsable, su hija está con fiebre en casa, y usted anda perdiendo el tiempo por Santa Clara». En efecto, mi hija Rachel por estos días estaba pasando por un virus de gripe y de vez en cuando tenía alguna fiebre. Cuando me despedí por la mañana dejé a la niña con 37 grados Celsius de temperatura, pero todo bajo control y bajo el cuidado de mi esposa con la cual estuve en contacto telefónico todo el tiempo. La escena con el agente me confirmó lo interesada que está la Seguridad del Estado en mi rol como padre y en el estado de mis hijas acerca de las cuales se encuentran muy pendientes. Así de interesados estaban en la familia Payá y ya sabemos el «regalo» que hicieron a Rosa María y hermanos hará dos años el cercano 22 de julio.

Hace unos días mientras escribía en mi oficina me interrumpió mi hija Rachel con su inocente sonrisa infantil, había envuelto sus manos en una cinta como si estuviese esposada: «Mira papá, lo mismo que te hicieron a ti». Entonces le tomé la foto que ahora comparto como recuerdo de estos aciagos días que inevitablemente dejaremos atrás porque precisamente a nombre de nuestros hijos nos urge construir a los padres cubanos una Cuba libre donde no sucedan nunca más los desmanes que ahora mismo tienen lugar. Lo que no comprenden quienes me juzgan es que el móvil principal de mis esfuerzos son precisamente esas dos niñas a quienes me he empeñado en regalar un país en libertad. Y no cejaré hasta lograrlo, en el nombre de Cristo.

 

Patmos: entre Resurrección y Pentecostés

Slide12Aunque cada día constituye una aventura espiritual, para muchos cristianos las fechas litúrgicas se convierten en acicates de la fe. Vivirlas en el contexto cubano no deja de serlo, por el contrario, a veces llega a vivirse lo mismo que se representa. El Instituto Patmos, ya con año y medio de existencia, trabajando fundamentalmente en el centro de Cuba, pero sin fronteras en su horizonte, es una prueba de ello.

Quienes compartimos juntos aquel Ágape para celebrar la Resurrección de Jesús, el inolvidable domingo 20 de abril, todavía saboreamos tanto la comida espiritual como la de los exquisitos platos preparados por los trabajadores de «Mi Campamento» que utilizaron como principal ingrediente el amor. Quien fuera la fundadora del sitio, la misionera Helen Black, una de las inspiraciones de nuestro proyecto, parecía estar todavía presente entre nosotros, cosechando una pequeña muestra de la inmensa cosecha para la cual sembró. El triunfo de Jesús sobre la muerte fue el tema de los conferencistas para los tres grupos de edades que se organizaron: las maestras de niños Aidita, Adalis y Lilibet; el pastor para los adolescentes y el profesor Raulín para los jóvenes y adultos en una insuperable conferencia magistral. Luego el sermón, los cantos, las poesías, décimas y testimonios; antes de la comida fraternal, muestra material del amor que nos une y de lo que significa compartir los hermanos juntos y en armonía. La Resurrección de Jesús no solo fue vista como una epopeya gloriosa del pasado sino como un incentivo no solo para derrotar la muerte postrera sino las tantas maneras de morir del día a día. Cuando regresamos aquella tarde a nuestras casas quien podía dudar que aquel día cada uno de los participantes no había también resucitado a una nueva manera de vivir, quién no podía exclamar al estilo de Jeremías en medio de las Lamentaciones: «No obstante, aún me atrevo a tener esperanza».

Alimentados con el fervor de la Resurrección nos lanzamos a vivir desde el siguiente día con mayores fe y valor para enfrentar las vicisitudes del cada día, y serían interminables los testimonios de toda índole, aunque hayamos tenido también nuestros judas y traidores entre café amargo y Café Amargo. Pero por si a alguien se le estaba agotando el combustible llegó con fuerza arrolladora el Pentecostés. Y para tamaña ocasión Patmos se buscó un salmista hasta con el nombre de David. La onda expansiva cubrió esta vez desde la ciudad de Santa Clara hasta el poblado avileño de Florencia, dejando huellas especiales, además de los dos puntos limítrofes, en Chambas, Taguayabón y Rosalía.

Hubo muchas expectativas tanto desde el Bien como desde el Mal. Aunque por supuesto cuando se trata de confiar en Dios el Bien siempre termina triunfando. Eso ya lo habíamos aprendido con la Resurrección. La primera jornada del viernes víspera de Pentecostés todo se inició con un zarpazo: el averno envió secuaces suyos que secuestraron violentamente tanto al salmista como a los organizadores de Patmos. Fue el pago a la buena voluntad de los coordinadores que durante semanas estuvimos tocando respetuosamente la puerta de instituciones culturales como: el Mejunje, el Museo de Artes Decorativas, el cine Camilo Cienfuegos, la sede de la AHS o la Casa de la Cultura de Santa Clara, que al principio mostraban disposición de recibir a David pero que luego de «consultar» se lamentaban de que no era posible. Pero esa misma fuerza bruta de los secuestradores, el Espíritu Santo, poder vivo y personal, la convirtió en una ola que utilizamos para lanzarnos aún más allá de las expectativas humanas que Dios se encargó de rebasar con creces. Nos sobrepusimos a la violencia con que se nos intentó disuadir y aunque hubo amenazas a David al estilo de «si regresas te vamos a romper», nos reorganizamos y lo hicimos.

Del secuestro del viernes, al que poco queremos referirnos, pasamos a celebraciones inolvidables coauspiciadas por la Iglesia Episcopal San Juan Bautista, de Florencia, donde David realizó dos presentaciones (sábado en la noche y domingo en la mañana) coronadas con la experiencia mística del propio bautismo y primera comunión del salmista, oficiado por el Rev. Andrés Espinoza, acompañado de tres ministros más: episcopal, veterocatólico y bautista. Esa propia noche se cerró con broche de oro cuando el pentecostés se celebró con bombo y platillo y al concierto de David se unió la agrupación placeteña de rap ABeC. La juventud bautista celebraba también su Día Mundial de Oración. La festividad se ofreció desde el portal del templo de la Iglesia Bautista Eben Ezer de Taguayabón (donde mismo fuera fundado el Instituto Patmos el 2 de febrero de 2013 en el marco del 74 aniversario de la iglesia) y para todo el pueblo convertido en templo teniendo como techo el cielo. Aunque las fiestas fueron sublimes y el Espíritu Santo se movió como quiso en su pentecostés, no podemos olvidar que Él a la vez es tanto fuego como silbo apacible, y es que profundamente mística resultó también, y que para nada pasó desapercibida en el poblado de Chambas, nuestra visita a la tumba que guarda el cuerpo de nuestro hermano en la fe Harold Cepero, mientras se aguarda la Resurrección, y donde elevamos oraciones, clamando por claridad y justicia, tanto para él como para Oswaldo Payá; a la vez que agradecimos por sus dos vidas, tan breves como fructíferas en la tierra pero que ahora nos acompañan desde el cielo.

El Pentecostés fue tan intenso que no alcanzó con el domingo y se prolongó al lunes llevándonos todavía a la Cuba más profunda y rural, y en el batey de Rosalía, coauspiciados por la Iglesia Bautista Resurrección, David dio uno de sus conciertos más memorables. Allí declaré ante los participantes que las mismas instituciones culturales que hoy no tienen permitido recibir a cantantes como David porque no pueden acoger a un arte genuinamente libre, algún día se lo disputarán, pero nadie podrá olvidar que cuando no le recibieron, aquella iglesita humilde perdida en el corazón de Cuba tuvo el valor de abrirle sus puertas.

El martes creíamos sería el paréntesis para cerrar las jornadas pero resultó en final abierto ya que el encuentro informal de David, que duró toda la noche, en pleno parque principal de Santa Clara, con decenas de jóvenes insatisfechos, dejó el itinerario en pausa, y por tanto la gira queda inconclusa, en espera del concierto del cierre, que hará historia en Santa Clara, como la ha hecho Patmos en este deambular entre la Pascua de Resurrección y el Pentecostés, para seguir adelante y ofrecerle Cuba a Cristo como ofrenda.

19, 20 y 21

logo 14 y medio

logo 14 y medio

Mayo no solo nos trae las lluvias salvadoras. A los cubanos en particular se nos acerca con fechas cargadas de hondo significado.

Un 19 de mayo de 1895 se sacrificó en cuasi suicidio tal vez el hombre que más soñara con el nacimiento de una República en Cuba, con TODOS y para el bien de TODOS, nuestro “llevado” y “traído” José Martí, el mismo que dijera en Tampa un  26 de noviembre de 1891: «…Yo quiero que la ley primera de la República sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre».

El 20 de mayo de 1902 nació por fin la soñada República, aunque sin Martí. Durante su corto medio siglo de existencia recibió constantes golpes a su ideal soñado. Tal vez la muerte prematura de Martí haya sido un aviso de los peligros que ya acompañaban su gestación, como en la práctica se evidenció. Pero el golpe fatal sobrevino en el 1959 con una revolución que engañosamente, y a nombre de Martí, a quien enarboló como autor intelectual, prometía salvarla, para realmente sepultarla con la más grande de las traiciones.

Pero como es propio de los creyentes quienes creemos que detrás de toda cruz sobreviene una resurrección, el resurgimiento de la República, no exenta de nuevos peligros, pero más curtida después de tantos años de aniquilamientos, sigue siendo el sueño de nuevos Martí. No perdemos la esperanza de que los anhelos del más universal de los cubanos se hagan por fin realidad en nuestra vejada nación. Por ello oramos y para ello trabajamos.

Y tal vez como un anticipo de este sueño, después de tantos años sin libertad de expresión, en esta semana intensa donde en Cuba recordamos un 19 de mayo seguido de otro 20 de mayo, sin celebraciones oficiales, tendremos un 21 de mayo con el nacimiento de un medio de prensa, que al decir de su artífice Yoani Sánchez será «Un espacio para contar Cuba desde dentro de Cuba». «14 y Medio» nace arrebatando este derecho a quienes continúan detentando el poder en la isla, los mayores traidores a la República que soñó Martí. Nos enseña de qué manera recuperaremos el anhelado sueño, arrebatando cada palmo de libertad que nunca nos será concedida de manera voluntaria. Pero cercano se encuentra el año ya cuando el 20 de mayo vuelva a ser un día de fiesta en Cuba, como muestra de que por fin tenemos una Patria con TODOS y para el bien de TODOS. Este 21 de mayo, con «14 y Medio» nos llena de esperanzas, de que no fue en balde aquel inaudito 19, y de que aquel 20 no ha muerto para siempre.

PATMOS: Solicitud de investigación imparcial en relación a la muerte de Harold Cepero y Oswaldo Payá

Logo PATMOSCuba, mayo de 2014

 Señor presidente Raúl Castro Ruz, dignatarios y dirigentes gubernamentales y estatales: la Gracia, el Amor y la Paz que han entrado al mundo con la Encarnación y Resurrección del Hijo de Dios hagan morada en nuestros corazones para que podamos discernir, a cada paso, lo que es mejor para el futuro de la Patria.

Hermanos todos, nosotros, hijos de la Iglesia de Jesucristo, que afincados en Dios nos orientamos y hablamos desde el pueblo y para el pueblo, vemos con profunda tristeza como son muchas las fisuras que imposibilitan el amor entre los cubanos; llegando al punto en que ya no pensamos, tal y como han de hacerlo quienes, siendo familia, tienen un proyecto común para el futuro. Ya nos preocupamos muy poco en lo que es conveniente y lo que enriquece al otro, y en la mayoría de las ocasiones, nos tratamos con mucho recelo y animosa enemistad.

Y una de esas fisuras es la circunstancia fatal y dolorosa en la que murieron hace ya dos años nuestros hermanos: Oswaldo Payá Sardiñas y Harold Cepero. Desde entonces mucho se ha especulado y no han sido pocos los encendidos improperios proferidos desde uno y otro lado. Es hora de detener los espíritus que nos mueven a la ofensa puesto que nadie, sino Dios, es propietario de la verdad, camino infinito y no vulgar tenencia del hombre.

En el caso de la terrible pérdida de Oswaldo y Harold, la sensatez que nace de la sabiduría y la caballerosidad impide que sea borrada de un manotazo la inocencia de los dirigentes del gobierno cubano porque sin pruebas conclusivas nadie podrá ser declarado culpable. No hay intuición ni deseos que puedan fabricar la verdad; sin embargo, hay toda una familia cubana sumergida en el dolor y se ha levantado una campaña internacional que pone en entredicho la capacidad que tenemos para resolver imparcialmente casos como estos. Y esto afecta el prestigio de Cuba, esto nos concierne a todos.  

Nosotros que no tenemos más autoridad que la que nace del anhelo de servir a Dios en su Creatura, ni más interés que la verdad, sin parcialidades ni simpatías particulares, soñamos acabar con cualquier maledicencia, esclarecer los hechos, restaurar nuestro prestigio común; y que no sea más tenido el inocente por culpable y éste no continúe escondiéndose de la responsabilidad.

Hombres del Gobierno Cubano, sabemos que entenderán nuestras razones, por amor a Dios que es amistad invariable a toda la humanidad, les suplicamos humildemente que utilicen el poder político que poseen para que con la comparecencia de observadores internacionales sea reabierto el caso de la muerte de nuestros hermanos en la fe, en la humanidad y en la nacionalidad, Oswaldo Payá Sardiñas y Harold Cepero, albergando de conjunto la esperanza de que la reputación de toda nuestra patria sea restaurada puesto que de lejos parecemos todos calmados cómplices de un crimen.

Al solicitar esta investigación definitoria, tenemos total consideración de la importancia que tendrán los resultados que de esta se derivasen para dar comienzo a la reconciliación de los cubanos. Con estos propósitos y embargados de un sentimiento constructivo rogamos a Nuestro Señor Jesucristo por el éxito de esta petición.

Repaso a las Treinta Preguntas sobre Libertad Religiosa en Cuba: 28. ¿Por qué si afirma que las extrañas muertes de creyentes como Juan Wilfredo Soto García, Laura Pollán y Oswaldo Payá Sardiñas no constituyen ejecuciones extrajudiciales, como muchos afirman, se niega a permitir investigaciones imparciales que han sido solicitadas y que sólo confirmarían su inocencia?

Por Mario Félix Lleonart Barroso

Me emocionó conocer que justo ayer

Foto del MCL

Foto del MCL

cuando publiqué mi post acerca de la pregunta cinco de treinta que anarbolamos acerca de la supuesta libertad religiosa en Cuba, la relacionada precisamente con la visita de Benedicto XVI, el Papa Francisco recibía en audiencia privada, en su residencia en Santa Marta, a la familia Payá. Ya sabemos que Juan Pablo II se había encontrado con Oswaldo Payá, y que en la visita de aquel papa a Cuba en 1998 el líder del Movimiento Cristiano Liberación no fue excluido de la manera como lo fue en el propio año de su muerte, cuando unos meses antes del deceso, Benedicto XVI nos visitara. 

En su intercambio, la viuda Ofelia, y los huérfanos Oswaldo José, Rosa María y Reinaldo nos dieron a conocer que al Papa Francisco nada le es ajeno sobre Cuba. Gracias a esta noble familia por sentir la responsabilidad de representar a todas las familias cubanas justo cuando muchas iglesias, como las que pastoreo, entendiendo y sufriendo la crisis de las células de la sociedad, celebran la Jornada del Hogar, entre el segundo domingo de mayo, Día de las Madres, y el tercero de junio, Día de los Padres. Le contaron sobre el atentado a Oswaldo Payá y a Harold Cepero, pero palparon que él estaba al tanto.

¿Tendrá este importante encuentro repercusiones en la Iglesia Cubana? Internacionalmente, como sucede también respecto a la petición de liberación a Sonia Garro y a su esposo Ramón Alejandro Muñoz, la solidaridad crece. En el ámbito teológico ha sido noticia que personalidades como Desmond Tutu se han sumado a la petición de una investigación imparcial sobre las muertes en extrañas circunstancias de Harold y Oswaldo. Pero, ¿dentro de Cuba qué vamos a hacer?

Ojalá las repercusiones hacia dentro de la isla se hagan sentir pronto, de momento, me complace anunciar que el Instituto Patmos del Libro y el Saber Cristianos, del cual soy coordinador, inspirado en el gesto de Francisco al recibir a la familia Payá, da a conocer una carta abierta dirigida al General Raúl Castro y sus acólitos donde, desde dentro de Cuba, solicita también la investigación imparcial para este caso. La carta abierta, fruto de la redacción colectiva de varios religiosos, protestantes y católicos, colaboradores en este Instituto, todavía sin sede física, pero que se desenvuelve de manera especial en el centro de la isla, aunque ya sostiene contactos de oriente a occidente, se concretó hace apenas dos semanas y recaba firmas de profesantes pertenecientes a cualquier afiliación religiosa.

No cejaremos hasta conocer a fondo que sucedió aquel fatídico domingo con las vidas de nuestros hermanos Harold y Oswaldo. Gracias Francisco. Ahora también sabemos que contamos con usted y alienta saberlo.

Repaso a las Treinta Preguntas sobre Libertad Religiosa en Cuba: 5. ¿Por qué no ha rendido cuentas por la ola represiva que tuvo lugar durante la visita del papa Benedicto XVI durante la cual centenares de personas fueron detenidas arbitrariamente o amenazadas, y de la cual aún permanecen en prisión y amenazados a severas penas Sonia Garro y su esposo Ramón Alejandro Muñoz?

(Por Mario Felix Lleonart, enviado a la Comisión de Justicia y Paz del Vaticano:
pcjustpax@justpeace.va)

Cuando pienso que de la visita de Benedicto XVI a Cuba han transcurrido ya más de dos años me lleno tanto de asombro como de indignación. Pero que el tiempo ha pasado inexorablemente nadie puede negarlo. Han sucedido tantas cosas. Tan solo en lo relacionado al ámbito eclesiástico del Vaticano, además de la reciente histórica canonización de Juan XXIII y de Juan Pablo II, tuvo lugar hasta un cambio de Papa, también histórico. Ante los ojos asombrados del mundo el Benedicto XVI que estuvo en Cuba dejó de serlo para volver a ser simplemente Joseph Razinger, dedicado, comprensiblemente, solo a la oración, ceniza y penitencia, dejando su lugar en el papado a Mario Bergoglio, convertido en Francisco I.

Tengo la fe que entre los rezos y avemarías de Razinger ocupe intensos momentos un matrimonio negro que, como secuela de su visita a Cuba, permanece confinado desde entonces en cárceles cubanas, sin que siquiera haya mediado un juicio, justo ni injusto. Siendo como fui victima también de aquella ola represiva, donde centenares de personas incluidas en la lista negra del sistema, mi esposa y yo estuvimos detenidos domiciliariamente en un edificio rodeado por fuerzas de la Seguridad del Estado de la ciudad de Alamar donde vivía un colega pastor a quien visitábamos, me parece increíble que esta otra pareja permanezca tras las rejas desde entonces. ¿Será entre otras razones por no tener blanca la piel como nosotros? La realidad es que aunque el tiempo y el Papa hayan pasado, Sonia Garro y Ramón Alejandro Muñoz siguen recluidos, y sus victimarios gozan de la mayor impunidad del mundo; salvándose incluso de escándalos tan mayúsculos como del descubrimiento en el canal de Panamá de una carga ilegal de armas escondidas bajo azúcar en buque de bandera norcoreana; y dándose el lujo de celebrar, presidiendo y todo, hasta una Cumbre Celac, donde otra ola represiva, también en absoluta impunidad, volvió a tener lugar.

En septiembre de 2013, y pareciéndonos ya entonces demasiado tiempo, mi esposa y yo viajamos desde Cuba a Washington invitados por Solidaridad Cristiana Mundial (CSW), enarbolando treinta preguntas de entre un cumulo de muchas otras que también habríamos podido agregar, y en las que la represión durante la visita de Benedicto XVI a Cuba y el confinamiento del matrimonio negro, ocuparon el quinto cuestionamiento. Más de medio año ha pasado desde entonces y lamentablemente la vigencia de nuestras treinta preguntas, incluyendo esta quinta, más que mantenerse intacta, aumenta su valor, dado el añejamiento del tiempo. La única señal emitida desde entonces por los carceleros fue un falso amago de juicio casi a fines del 2013 luego de lo cual otros asuntos, sin lugar a dudas trascendentes también, como el paradigmático caso de Alan Gross, objeto de nuestra pregunta trece, ocupan casi toda la atención.

Pero afortunadamente Sonia y Ramón Alejandro no se encuentran en el triste saco de los casos anónimos (¿cuántos habrá?) con los que el régimen se ensaña y muestra sin mascaras su verdadera naturaleza retorcida. Una campaña internacional crece en la misma proporción de la impunidad de los victimarios y terminará por liberar al matrimonio. No en balde en esta misma hora es probable que en el silencio místico de su reservado cuarto hasta un expapa rece por ellos; a pesar del silencio de un Vaticano cuyo trono tal vez por ello mismo abandonara, entre otras sonadas razones.

#JWS: Tres años de impunidad. : Repaso a las «Treinta preguntas sobre libertad religiosa en Cuba»: 28. ¿Por qué si afirma que las extrañas muertes de creyentes como Juan Wilfredo Soto García, Laura Pollán y Oswaldo Payá Sardiñas no constituyen ejecuciones extrajudiciales, como muchos afirman, se niega a permitir investigaciones imparciales que han sido solicitadas y que sólo confirmarían su inocencia?

080520113314 080520113334 JUAN WILFREDO SOTO GARCÍA EL ESTUDIANTE. 13.10.2010

Recién se cumplieron tres años de la brutal golpiza al activista Juan Wilfredo Soto García que desembocó en su muerte poco más de 48 horas después. Luego sobrevinieron las de connotados líderes, como Laura Pollán y Oswaldo Payá Sardiñas, en las que muchos concordamos también ante la presencia de la mano criminal. La efectividad de la ejecución extrajudicial, verificada en el caso Juan Wilfredo Soto, probada con creces ya por otros regímenes, está fuera de toda duda también en Cuba. El régimen que se inició con los paredones ya no los necesita. La moratoria desde 2003 respecto a la pena de muerte, todavía vigente en la legalidad cubana, es posible ya que quienes detentan el poder han perfeccionado su manera de eliminar a sus adversarios políticos pagando por ello el menor precio posible. Corea del Norte que elimina «judicialmente» sin miramientos, como demostró el pasado agosto con más de una decena de jóvenes, deberá tomar lecciones de sus aliados cubanos, más sofisticados, más duchos en la materia, mejores alumnos de Maquiavelo.
En los tres casos mencionados es denominador común la negativa a investigaciones imparciales que a quien más beneficiaría sería al sospechoso de asesinato si en verdad fuese inocente. ¿Qué ha sucedido en el caso Juan Wilfredo a tres años de su muerte?
– Sus familiares más cercanos, sus dos hijos, muy conscientes de la criminalidad del régimen, se pusieron a salvo y emigraron a través del Programa de Refugiados de los Estados Unidos.
– La investigación imparcial solicitada a la Fiscalía General de la República no ha brindado ninguna conclusión.
– Ningún otro testigo, de la lista que entregué a la Fiscalía Provincial de Villa Clara, fue llamado a declarar, y según se me explicó allí recientemente cuando me dirigí a procurar información, el Fiscal Osmel Fleites Cárdenas, quien escuchó mi declaración, levantó acta, y me confirmó que existen suficientes elementos para abrir un proceso, «ya no tiene que ver con el asunto porque además la investigación pasó a manos de la Fiscalía Militar».
– Ha sido imposible acceder a la familia de Alexis Herrera Rodríguez, vecino entonces de Calle 5ta., entre 12 y 14, número 204, en el Reparto Camacho de Santa Clara, uno de los tres militares que participó en la golpiza mortal a Soto, manipulados con toda seguridad por oficiales de la Policía Política que varios testimonios ubican aquella fatal mañana de la golpiza en la misma área, y quien se suicidó con un disparo aquel domingo 8 de mayo de 2011, Día de las Madres en que sepultábamos a Soto, para sobrevivir apenas cinco días y ser finalmente sepultado con un operativo de vigilancia extrema el viernes 13 de mayo.
– A los otros dos policías que participaron en la golpiza, veinteañeros también como Alexis, un hombre y una mujer, también ha resultado imposible localizarlos aunque se rumora que ambos quedaron fuera del cuerpo militar, al menos visiblemente, y de un probable internamiento de uno de ellos en un hospital psiquiátrico.
Por nuestra parte vivimos conscientes de los peligros que contraemos al denunciar la realidad de la ejecuciones extrajudiciales que son llevadas a cabo con total impunidad en Cuba, se nos ha confirmado en estos últimos días por medio de llamadas anónimas recibidas, pero no nos queda otra alternativa si es que de verás queremos representar al Dios de Justicia a quien decimos servir y a cuya protección nos encomendamos.

Frei Betto reconoce la ausencia de un auténtico movimiento social en Cuba

Intercambiando con Frei Betto en una de las pasadas ferias del libro

Intercambiando con Frei Betto en una de las pasadas ferias del libro

Su respuesta tajante me resultó contrastante con las de su entrevistado en el famoso libro «Fidel y la Religión». Lo ejemplifica entonces su pregunta sobre si en Cuba se había cerrado alguna iglesia, la cual tuvo que volver a realizar varias veces, como muestra el libro, ya que Fidel daba vueltas y vueltas, como era propio de él, sin contestar, para finalmente terminar mintiendo diciendo que no, que nunca, cual si no sobrasen los hechos para argumentar lo contrario (lo atestigua el sello sobre la puerta de la iglesia bautista «Eben Ezer» de Taguayabón, donde pastoreo, entre el 30 de septiembre de 1963 y diciembre de 1964, a la par que sus homologas y vecinas iglesias en Vueltas y  Buenavista, en Villa Clara), sin hablar de las que nunca, nunca, volvieron a abrir.

Frei Betto fue contundente sin embargo cuando Mónica Baró Sánchez le preguntó si percibía en Cuba algún movimiento social, en entrevista que fuera publicada primero en «Rebelión», y luego también en el boletín «Caminos» No. 135 del Centro Memorial Dr. Martin Luther King, Jr, bajo el título «En el nombre político del amor». El fraile dominico fue al grano en su respuesta, con toda la moral que asiste a alguien que como él conoce y apoya movimientos sociales justísimos, como el de los «Sin Tierra» de Brasil. Respecto al cadáver de la sociedad civil cubana (que algunos sin embargo nos empecinamos en resucitar) el teólogo argumenta:  

«NO. Aquí hay sindicatos, federación de mujeres, la FEU (Federación Estudiantil Universitaria) con la que estuve tres horas. Hay un montón de asociaciones, hay todo eso, y muy buenas, pero había que mejorar esos mecanismos para que lleguen al conjunto de la población cubana. Y sobre todo, tocar un mecanismo que tiene supremo poder: los medios cubanos. Me parece un poco raro que en un país socialista la gente esté todo el tiempo mirando películas de Hollywood y telenovelas de la Globo. Es un desafío para la gente de izquierda, la gente progresista, crear programas atractivos. No es posible que no tengamos inteligencia, imaginación, creatividad para esto.»

Si el famoso escritor brasileño se adentrara en las realidades tan contradictorias al discurso oficial en el que él ingenuamente ha creído, y que millones de cubanos vivimos día a día, no solo encontraría estas evidentes contradicciones que expone sino muchas más que le atraerían la misma decepción que le hiciera renunciar a sus funciones en el Partido de los Trabajadores del Brasil. Pero es duro, muy duro, despertar de las utopías, especialmente cuando estas se encuentran tan distantes de las realidades, como en el caso Cuba.

Mi ausencia

En JWC junto al pastor Frank López

En JWC junto al pastor Frank López

Con Alberto Mottesi

Con Alberto Mottesi

Slide2

Mi pobre blog siempre pagando las consecuencias, de lo bueno o de lo malo. Esta vez de algo positivo: otro exitoso mes en el ministerio de diplomacia ciudadana que tan en serio nos tomamos desde la caída del injusto permiso de salida (carta blanca), vigente en Cuba hasta el 14 de enero de 2013. Fue un tiempo tan intenso, y aunque a diferencia de lo que vivo en Cuba tenía casi constante acceso a internet, tuve que tomar la triste decisión entre vivir o escribir.

El objetivo principal del periplo fue la celebración del aniversario diez de la iglesia «Jesus Worship Center (JWC)» (www.iglesiadoral.org) pastoreada por Frank y Zayda López (@PastorFrankJWC y @Zaydalopez7), que propició el encuentro, haciendo realidad un sueño de mi infancia, con el «Pastor de los Presidentes», Alberto Mottesi (@albertomottesi). Adicionalmente compartimos con otras diversas iglesias como las de @casacristiana o @javiersotolongo tendiendo puentes fraternales entre estas y las nuestras en Cuba. Como parte de nuestra labor diplomática también sostuvimos encuentros colaterales con personalidades de la sociedad civil norteamericana y con políticos de renombre como los congresistas cubanoamericanos Ileana Ross Lehtinen y Mario Díaz Balart. A la vez que tuvimos la oportunidad de reencontrarnos con nuestro Félix Varela de San Agustín o nuestro Martí de Tampa.

Ahora que me encuentro de regreso en Cuba donde escasean tanto la internet como también el tiempo me veo en la difícil situación de no postergar más el volver a este sitio, prolongación de mi mismo desde aquel año difícil de 2010, cuando murió Zapata.  Entre otras angustias por Cuba volveré sobre las treinta preguntas sobre libertad religiosa con las que el pasado año viajara a Washington de la mano de Solidaridad Cristiana Mundial (CSW) y que lamentablemente no solo que no han perdido su desafortunada vigencia sino que la incrementan, como es perfectamente evidenciable en las próximas que nos ocupan: la quinta, sobre Sonia Garro, todavía en prisión desde la visita de Benedicto XVI, sin siquiera celebrársele juicio; la trece, sobre el insolente encarcelamiento de Alan Gross, ahora además en preocupante huelga de hambre; la veintiuno, acerca de las negativas de visas religiosas, ahora que por quinta vez, según lo ha dado a conocer el Informe del primer trimestre del año del Grupo de consultores de la sociedad civil, le ha sido negada a alguien de tanta relevancia para los evangélicos del continente como lo es Alberto Mottesi, el «Pastor de los Presidentes», o la veintiocho, sobre la negativa a investigaciones imparciales sobre extrañas muertes de creyentes, a solo unos días del aniversario tres de la golpiza (5 de mayo) y muerte como consecuencia (8 de mayo) de Juan Wilfredo Soto García, y en medio de un creciente coro de voces, que ya incluye a Desmond Tutu, exigiendo la investigación sobre la muerte de Oswaldo Payá Sardiñas. Nada, que todas estas urgencias, aún en medio de las vicisitudes diarias, me obligan a dedicar estos minutos y superar el tiempo de mi ausencia.