Ernesto Borges Pérez y sus diecisiete años de prisión política

Nota que me entregara Ernesto Borges Perez en mi visita el 6 de septiembre de 2014

Nota que me entregara Ernesto Borges Perez en mi visita el 6 de septiembre de 2014

El sábado 6 de septiembre de 2014 tuve el privilegio de visitar a Ernesto Borges Pérez en la prisión del Combinado del Este en La Habana, sustituyendo a su padre en la visita familiar programada para ese día, ya que me niegan ejercer mi ministerio como capellán en Cuba. Este mes cumple diecisiete años prisionero debido a documentos incautados en 1998 por la Seguridad del Estado donde pretendía dar a conocer a USA la identidad de veintiséis espías preparados para ser enviados y realizar allí misiones como las de los atrapados apenas unas semanas después de la Red Avispa. Su acción fue tipificada en Tentativa y se le condenó a treinta años de cárcel, luego de conmutársele la Pena de Muerte. En el momento de su apresamiento Borges se desempeñaba como Primer Analista y Capitán de la Dirección General de la Contra Inteligencia. Influido al parecer por los aires de la Glasnot y la Perestroika que tuvieron lugar en la URSS precisamente cuando se formaba allá por la KGB, Borges tuvo la osadía de trabajar contra el sistema, desde sus propias filas.

Mi visita fue sucedida el lunes 8 de septiembre por la del Teniente Coronel Julio cesar Martínez Batista, Jefe de la Fiscalía Militar del Minint, quien acudió para advertirle que no se me admitiría volverle a hacer otra visita, y reiterarle de paso que él es un preso del general Raúl Castro, y que ni visitas de cardenales ni de pastores determinarán nada. Para ratificarle las amenazas que meses antes le transmitiera el Coronel Almanza: de que no se hiciera ilusiones, que aunque en su juicio de 1998 se le conmutó la Pena de Muerte, no se le concederá la libertad condicional que por ley le correspondía al tercio de la sanción, que esté consciente de que se encuentra en el corredor de la muerte.

Este preso político cubano se ha visto obligado a realizar huelgas de hambre que han puesto en vilo al régimen cubano la última de las cuales, en 2012, culminó a petición del cardenal Jaime Ortega quien en persona fuera a pedírselo a la prisión, utilizando para ello promesas de libertad que no han sido cumplidas, con el propósito de no entorpecer la entonces inminente visita de Benedicto XVI. Ahora que se acerca otra visita papal, y dada la trascendencia que ha tenido la entrevista que cediera el arzobispo cubano al programa «Hora 25» de la cadena Ser donde niega la permanencia en cárceles cubanas de reos por motivos políticos, ignorando hasta el caso Ernesto, cuyo caso, por lo menos hasta hace tres años y medio, él llevaba tan de cerca, agradezco a 14ymedio la publicación de mi escrito de opinión «La mala memoria del cardenal» http://t.co/ajI1BJxWk4 http://t.co/jLmxEghoSJ . El pasado lunes 1 de junio Ernesto recibió su más reciente visita familiar donde contó acerca de la visita del teniente coronel Joaquin realizada el sábado 30 de mayo en la cual intentaba negociar su probable libertad a cambio del cese del creciente activismo en las calles exigiendo su liberación, y en la cual Ernesto dejó claro que su libertad no es negociable.

Pregunta 13 de 30: ¿Por qué no libera al ciudadano estadounidense Alan Gross, quien se encuentra preso en Cuba por apoyar con tecnología a la comunidad judía cubana y que constituye una advertencia a modo de escarmiento para quien decida ser solidario con cualquier otra de las comunidades existentes?

La pregunta trece, de treinta  (http://cubanoconfesante.com/?p=733) que presentamos el año pasado en Washington cuestionando las supuestas libertades religiosas en Cuba invitados por Solidaridad Cristiana Mundial (CSW) está dedicada al caso del contratista norteamericano Alan Gross. Desde publicada esta interrogante varias veces hemos vuelto sobre ella ya que sin lugar a dudas constituye una de las mas tocadas por la opinión pública, especialmente en las últimas semanas.

El pasado 10 de septiembre la cancillería estadounidense reiteró que el caso del ciudadano Allan Gross, prisionero en Cuba por ingresar equipos de comunicación a la isla, no es comparable al de los espías cubanos integrados a la Red Avispa y que por tanto no habrá canje. Esta reafirmación invalida el objetivo principal del secuestro de Gross por parte del régimen de La Habana y tuvo lugar en medio de una las intensas campañas de este, la denominada “Jornada Internacional por la Libertad de los Cinco“, que más que la liberación de unos presos tiene por objetivo hacer ruido y ganar adeptos entre los ingenuos que puedan quedar en el mundo a favor de un totalitarismo caribeño que se acerca a sus sesenta años.

De ahí para acá el nombre de Gross ha seguido moviéndose por instancias que se suman a la propuesta del régimen de que debe cambiársele por los espías. El Servicio Mundial de Iglesias por ejemplo, que desde sus orígenes en 1948 responde a los intereses políticos de las extremas izquierdas, realizó una visita de tres días a Cuba a principios de noviembre en la cual dejó claro que Gross es solo su escusa y su objetivo, la liberación de los espías cubanos. Entre la saga de editoriales del The New York Times, que hasta el momento suman seis, dedicados a Cuba, el cuarto, precisamente publicado a inicios de noviembre, se sumaba también a esta propuesta de canje contraria a la reiteración del gobierno norteamericano. Noviembre concluye por cierto con la visita del editorialista Ernesto Londoño a Cuba y con él, el espíritu de cada editorial.

Lo del apoyo del Servicio Mundial de Iglesias a cada slogan propagandístico de la agenda política de La Habana es de esperar, siempre ha sido igual su trayectoria, nunca una declaración a favor de las víctimas del sistema, siempre a favor del victimario. Lo del The New York Times ha sido diferente pues en su historial pueden recordarse posiciones de salir al paso a los desmanes dictatoriales en la isla, como ocurrió ante la denominada Primavera Negra de 2003, que le valió entonces, no los comentarios favorables, “reflexiones” satisfechas de Fidel Castro o hasta la publicación íntegra de uno de sus editoriales en el Órgano del Partido Comunista de Cuba de ahora, sino todo lo contrario, como aquel artículo en Granma del 24 de abril de 2003 bajo la firma de Arsenio Rodríguez que nos recordara Reinaldo Escobar de 14ymedio donde se declaró: “…sus decisiones editoriales no son ni serias ni liberales, sino que cumplen obedientemente las órdenes en defensa de los intereses de los poderes dominantes en esa nación”, para concluir: “… el verdadero papel del The New York Times (sic) fue, es y será, representar a la esencia del imperio”.

Por otro lado The New York Times nunca ha dicho que quien mantiene su poder político en Cuba sea un buen gobierno, lo que critica son las posiciones históricamente sostenidas por USA, desde su punto de vista ineficaces para conseguir el desmantelamiento del totalitarismo en la isla, y para lo cual propone otra política, de acercamiento, lo que algunos denominan “el abrazo de la muerte”. Si bien no coincido con las tesis del The New York Times, si espero que tras su presente visita a la isla los nuevos editoriales que salgan corrijan un poco su dirección actual. Por ejemplo en el caso del referido cuarto editorial tengo la esperanza que Londoño no solo pueda entrevistar en persona al propio Gross, sino que explore otra posibilidad de salida para el caso que le preocupa de los espías, más viable para un canje y que hasta el momento no se ha tenido en cuenta: la del cambio de otros probables espías por espías.

 

Alan Gross, cuando estaba libre, con su familia

Alan Gross, cuando estaba libre, con su familia

Se trata de casos como el de Ernesto Borges Pérez, acusado de espiar para USA, ahora confinado en la Prisión Combinado del Este, en su dieciséis año de prisión, el mismo tiempo que los tres que se mantienen presos en USA acusados de espiar para Cuba. En acusaciones similares a la de Borges se encuentran: Rolando Sorráz Trujillo, condenado a veinticinco años desde 1995; Claro Fernando Alonso Hernández, condenado a treinta años desde 1996; del equipo de trabajo de Ricardo Alarcón, expresidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Miguel Álvarez, condenado a treinta años, y Mercedes Arce, condenada a catorce; y Eusebio Conrado Hernández García, cercano a los defenestrados Carlos Lage y Felipe Pérez Roque, condenado a veinte años que cumple en la prisión de Guanajay. Es obvio que el régimen en Cuba no se encuentra interesado en deshacerse de estos presos que parecen ser objetivo prioritario del general Raúl Castro pero abría que ver su reacción si el gobierno de los EE.UU reconoce que la acusación bajo la cual La Habana mantiene en prisión bajo severas penas a estos cubanos fuera cierta y diese un paso aun mas allá valorando como mas válida la opción de canjear por ellos a los tres espías cubanos en USA. Tal vez The New York Times que gusta de buscar la quinta pata a la mesa redirija su propuesta y exponga esta opción más equiparable. Y que por supuesto el canje de espías por espías se produzca con la previa liberación de Alan Gross que evidentemente no espiaba para nadie y se encuentra injustamente preso en Cuba.

Pregunta 10 de 30: ¿Por qué coacciona, amenaza y reprime a los nuevos grupos religiosos aprovechándose del limbo ilegal al que se les condena?

El lunes 29 de septiembre publiqué en «Cubano Confesante»  un comentario acerca de la vigencia de nuestra pregunta nueve de un total de treinta (http://cubanoconfesante.com/?p=733) que presentamos el año pasado en Washington cuestionando las supuestas libertades religiosas en Cuba invitados por Solidaridad Cristiana Mundial (CSW). La pregunta tiene que ver con grupos religiosos cuyo derecho legal de inscripción en el Registro de Asociaciones del Ministerio de Justicia es negado. Ese mismo día, tras la publicación emprendí un viaje por las provincias de Camagüey, Las Tunas y Santiago de Cuba donde fueron objeto de mi visita algunos de estos grupos comprobando que la pregunta 10 tristemente también mantiene su vigencia total. Las preguntas 9, 10 y 11 fueron temas de nuestras discusiones durante mi recorrido. Ya que el diario digital #14YMedio solidariamente público un escrito mío resultado de tal viaje creo que constituye evidencia para reafirmar esta décima pregunta y he aquí el enlace: Un periplo por caminos de la fe.

19, 20 y 21

logo 14 y medio

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Mayo no solo nos trae las lluvias salvadoras. A los cubanos en particular se nos acerca con fechas cargadas de hondo significado.

Un 19 de mayo de 1895 se sacrificó en cuasi suicidio tal vez el hombre que más soñara con el nacimiento de una República en Cuba, con TODOS y para el bien de TODOS, nuestro “llevado” y “traído” José Martí, el mismo que dijera en Tampa un  26 de noviembre de 1891: «…Yo quiero que la ley primera de la República sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre».

El 20 de mayo de 1902 nació por fin la soñada República, aunque sin Martí. Durante su corto medio siglo de existencia recibió constantes golpes a su ideal soñado. Tal vez la muerte prematura de Martí haya sido un aviso de los peligros que ya acompañaban su gestación, como en la práctica se evidenció. Pero el golpe fatal sobrevino en el 1959 con una revolución que engañosamente, y a nombre de Martí, a quien enarboló como autor intelectual, prometía salvarla, para realmente sepultarla con la más grande de las traiciones.

Pero como es propio de los creyentes quienes creemos que detrás de toda cruz sobreviene una resurrección, el resurgimiento de la República, no exenta de nuevos peligros, pero más curtida después de tantos años de aniquilamientos, sigue siendo el sueño de nuevos Martí. No perdemos la esperanza de que los anhelos del más universal de los cubanos se hagan por fin realidad en nuestra vejada nación. Por ello oramos y para ello trabajamos.

Y tal vez como un anticipo de este sueño, después de tantos años sin libertad de expresión, en esta semana intensa donde en Cuba recordamos un 19 de mayo seguido de otro 20 de mayo, sin celebraciones oficiales, tendremos un 21 de mayo con el nacimiento de un medio de prensa, que al decir de su artífice Yoani Sánchez será «Un espacio para contar Cuba desde dentro de Cuba». «14 y Medio» nace arrebatando este derecho a quienes continúan detentando el poder en la isla, los mayores traidores a la República que soñó Martí. Nos enseña de qué manera recuperaremos el anhelado sueño, arrebatando cada palmo de libertad que nunca nos será concedida de manera voluntaria. Pero cercano se encuentra el año ya cuando el 20 de mayo vuelva a ser un día de fiesta en Cuba, como muestra de que por fin tenemos una Patria con TODOS y para el bien de TODOS. Este 21 de mayo, con «14 y Medio» nos llena de esperanzas, de que no fue en balde aquel inaudito 19, y de que aquel 20 no ha muerto para siempre.